Mis gatos

África

AKA Diva. Mi primera gata y compi durante 17 años; ella fue quien nos mostró el maravilloso mundo de los gatos.

Cuando llegó parecía un mono Amedio en miniatura, y hoy es la reina de la casa por derecho propio. Entrañable, con la seguridad del que sabe que va a acabar consiguiendo lo que quiere, y una conversadora incansable. Jamás pensé que una gata pudiera ser tan divertida ni decir "piérdete" de una forma tan clara...

Vive en casa de mis padres y, por supuesto, consigue que lo primero que hagamos al llegar a casa, sea ir corriendo a decirle algo (más nos vale). 

A día de hoy está enfermita, pero sus ganas de seguir adelante han superado cualquier expectativa. Mi campeona.
(África ha cruzado el arco iris, pero se merece estar en esta cabecera, como siempre estará con nosotros). 

Nala

Mi guía.
Naluchina apareció cuando sólo tenía un mes en el garaje de unos amigos, con más miedo que hambre, y sin rastro de la madre.

Gracias a alguien que pensó que iba a ayudarme en un momento difícil, la acogí en mi vida, o más bien me acogió ella, porque han sido dos veces las que esta pequeña me ha sacado del bache.

Por supuesto es fan de U2 y Springsteen, además del animal más dulce del planeta, siempre pendiente de ti, con un poder terapéutico que aún no alcanzo a comprender.

Mojito

No tengo palabras para describirle.
Mojito es la definición del gato happy. ¿Gatos desconfiados y recelosos de los extraños? Deben estar hablando de otro...
Y todo lo que tiene de feliz, lo tiene de sabio y guardián valiente.

Apareció junto a sus hermanos en una caja de cartón, con apenas un mes de vida. Gracias a Protección Felina, entró en nuestra familia, y supo que esta iba a ser su casa desde que cruzó la puerta. Venía adaptado de serie.

Nos conquistó a todos desde el minuto uno: puede estar colgado de una lámpara, dando botes o pasarse el día entero ronroneando a tu lado si se lo pides.